NUESTRO ENTORNO

La Tierra de Ágreda está dominada por la mole del Moncayo (2.316 m.), la máxima altura, no sólo de la provincia, sino también del extenso Sistema Ibérico. Su envergadura posibilita una graduación de las temperaturas y, sobre todo, de la pluviosidad, creciente siempre en función de la altura y condicionante de los distintos pisos fitoclimáticos. El gran valor paisajístico y ambiental del Moncayo ha merecido protección con la figura de  Parque Natural en la zona aragonesa, sin que se haya desarrollado una continuación del mismo en la vertiente soriana como sería lógico y deseable.

La altitud media es de 1029 metros. La propia Ágreda se sitúa a 929 m. Las precipitaciones oscilan entre los 300 y 500 mm. Se dan fundamentalmente en invierno y son propias de un clima semiárido. La vegetación natural es de monte bajo de encina y roble, con suelo cubierto de espliego, enebro o sabina y tomillo. El 70% de la superficie es de terrenos no cultivados y, en el resto, se cultivan , principalmente, trigo y cebada.

Ágreda se sitúa en un importante nudo de comunicaciones al cruzarse en esta localidad las dos principales carreteras de la zona: la N-113 que une la Rioja y Navarra con el Centro de la Meseta, y la N-122 que comunica Zaragoza con la Cuenca del Duero. Por otro lado su situación, en las lindes de Navarra y Aragón y en los confines de Castilla, confiere a esta Tierra el carácter de territorio frontera.

La población de la comarca del Moncayo es de 8.523 h., según padrón del año 2009. Los municipios de Ágreda y Ólvega presentan la mayor densidad de población de la zona. La crisis de la ganadería, unida a las condiciones desfavorables de la agricultura propiciaron una tradición industrial en la zona. Ello es especialmente evidente en Ólvega donde la industria ocupa al 35,99 % de la población activa, frente al sector servicios con un 35,96 %  la agricultura (20,74 %) y  la construcción (7,32 %). A pesar de esto, el sector industrial se encuentra con dificultades serias: falta de equipamiento necesario, de suelo destinado a actividades económicas y, sobre todo, de capital humano debido al vacío demográfico comarcal. Debemos resaltar, como industria emergente, la de las energías renovables. En especial destaca la reciente construcción de diversos parques eólicos.

Existen recursos turísticos poco explotados, pero de grandes posibilidades. Sobresalen los excepcionales espacios naturales del Moncayo y el casco histórico de Ágreda, -declarado conjunto histórico-artístico y que guarda varios monumentos nacionales declarados o incoados en su interior-, pero no debemos olvidarnos de  la Zona Arqueológica de Augustóbriga, la ruta de los Torreones y diversos monumentos de Ólvega. También debemos recordar, por su atractivo y su enclave natural, pueblos como Cueva de Ágreda, Beratón, Vozmediano, Noviercas, Borobia. Por último, mencionemos la proximidad del corredor del Ebro con todos los enclaves de interés que, a muy poca distancia de Ágreda, podemos aprovechar. 

Añadimos a continuación un listado de los pueblos pertenecientes a la zona educativa de nuestro Centro, según el Padrón Municipal de habitantes de 1 de enero de 2009. Añavieja y Valverde no están en la tabla por estar incluidos en sus respectivas cabeceras.

Respecto al padrón de 1991, donde la población de Ágreda era de 3647 hab., ha habido un descenso significativo de  432 habitantes. No obstante desde enero de 2001 el descenso se ha reducido a 118 habitantes.

De los datos anteriores podemos extraer una clara conclusión: excepto Ágreda, casi todo el resto del territorio se encuentra por debajo de la densidad de población de la provincia de Soria (9,48 h./Km²), la cual ya es de por sí suficientemente baja si la comparamos con la media nacional (76 h/Km²).

Por otro lado, en la pirámide de población se puede comprobar que existe una razón de sexos siempre superior en el caso de los varones. Esto nos indica que la mujer joven no quiere o no puede vivir en los pueblos y  emigra, por tanto, bien a realizar estudios, bien a donde pueda trabajar de acuerdo a su cualificación. Esta circunstancia  agrava la despoblación.

Otro hecho determinante es el envejecimiento de la población. Existe un segmento particularmente ancho: el de las edades comprendidas entre los  25 a 39 años que corresponden exactamente a la etapa de los nacidos en los años 60 en adelante. A partir de ahí  se produce un desplome vertiginoso de la natalidad.

También es significativo el hecho de que en Ágreda y su comarca la inmigración ha sido un fenómeno minoritario (contrariamente a lo que sucede en Ólvega). Tampoco hoy día se detecta un aflujo significativo de minorías étnicas, -tal y como sucede en otras zonas de la provincia-, capaz de relanzar las tasas de natalidad. 

Cosas para no perderse en la Comarca:

• Ágreda: ofrece un gran abanico de posibilidades históricas y paisajísticas. La llaman la ciudad de las tres culturas: hebreos, árabes y cristianos. Años más tarde se la disputaban los aragoneses y los castellanos. Se trata de una ciudad amurallada de 3 Km. La ciudad tiene un bonito paseo en la Dehesa, junto al río Queiles, donde está ubicado un jardín de estilo barroco.
  
  Iglesias románicas de: Fuensauco, Tozalmoro y Omeñaca.
• Fuente romana
• Iglesia de Ntra. Sra. de la Peña: es de estilo románico. Es un edificio de 2 naves, que cuenta con pinturas del siglo XV.
• Iglesia de Ágreda: es de estilo románico del siglo XII.
• Muro de Ágreda: 3 Km. de muralla árabe, que aún se conserva, en la que todavía figuran las dos Puertas Emirales. Muy bonitas, que entran al barrio árabe. Torreón de la Mota: de origen musulmán y situado en el barrio árabe.
• Yacimiento de Agustóbriga: fue declarada Bien de Interés Cultural en 1994. 

• Palacio de los Castejones:
• Barrio Judío: se nota en el trazado de sus calles y de sus edificios.
• Convento de la Concepción: donde descansan los restos de la Dama Azul o sor María Jesús de Ágreda, de la cual decían tenía el don de la ubicuidad. Era asesora espiritual del rey Felipe IV.
• Iglesia de San Miguel: es de estilo gótico, con torre románica del siglo XII. Destaca su retablo renacentista.
• Iglesia de San Juan: es de estilo gótico con elementos románicos.

• San Felices: pueblo de origen árabe.

• Añavieja: lugar de nacimiento del escritor Avelino Hernández. En el siglo XII, construyeron su iglesia sobre los restos de lo que fuera una villa romana, Augustóbriga. Por allí pasaba la Vía que unía Numancia con Zaragoza (Caesaragusta).
• Castillo de San Felices: de origen musulmán, otea el horizonte desde una colina.

• Vozmediano: donde se encuentra el nacimiento del río Queiles. Aldehuela de Ágreda: de aquí parten varias rutas hacia el Moncayo.
• Castillo de Vozmediano: es de estilo gótico.

• Olvéga: situada entre dos montañas: el Moncayo y el Madero. La Mina Pétra: antigua población minera, de impresionante belleza paisajística y gran afluencia de turismo rural.
• Iglesia de Santa María la Mayor: de estilo gótico.
• Iglesia de la virgen de Olmacedo: de estilo románico tardío.

• Cueva de Ágreda: donde se encuentran unas cuevas repletas de estalactitas y estalagmitas muy interesantes.

• Beratón: situado a 1.300 mts. de altitud. Es un bonito pueblo de origen romano.

• Noviercas: donde vivió y se inspiró Gustavo Adolfo Béquer con su esposa y musa, Casta Esteban.

• Almenar:
  • Castillo de Almenar: de origen medieval. Fue construido en el siglo XV por la familia Bravo de Laguna y Saravias y Ríos. Consta de: doble recinto amurallado, un foso artificial con puente levadizo, una torre de homenaje y el patio de armas. Está bastante bien conservado. Fue declarado Bien de Interés Cultural el 22 de abril de 1949.